Una empresa biofarmacéutica líder buscaba actualizar su solución de limpieza de filtros. En el pasado, el proceso era muy laborioso y requería mucho tiempo. Los conjuntos de filtros tenían que ser levantados por una grúa y separados manualmente por dos empleados. Después, los empleados tenían que limpiar los filtros con pistolas de lavado, mangueras y paños. Este proceso creaba riesgos de seguridad y era demasiado largo y costoso. Para resolver los problemas, se nos pidió que diseñáramos un sistema que pudiera proporcionar una excelente limpieza in situ con un uso mínimo de agua y productos químicos y sin manipulación manual. Además, el sistema tenía que estar equipado con componentes higiénicos, de calidad farmacéutica, que se autolimpiaran y enjuagaran para evitar la contaminación cruzada.
La solución de limpieza in situ propuesta
Como empresa líder mundial en tecnología de pulverización, se contactó con Spraying Systems para que proporcionara información especializada sobre el proceso de limpieza in situ solicitado.
En la industria biofarmacéutica, el nivel de limpieza es obviamente crítico, por lo que los residuos estaban fuera de lugar. Como reto adicional, las boquillas debían descansar en el producto durante el funcionamiento del filtro. Con las especificaciones establecidas, desarrollamos un sistema que consistía en 3 boquillas Mini-ROKON® D41800 que se instalaron en la unidad de filtrado. También añadimos una 27500D para el enjuague desde la parte superior del lecho filtrante. El proceso de limpieza se controlaría mediante un patín de bombeo que podría acoplarse fácilmente a los filtros para el proceso de limpieza.
Tras varias visitas y discusiones, el sistema de limpieza in situ se puso a prueba en una unidad de filtrado durante 6 meses antes de entregar el resto de sistemas.
Resultado
Tras el periodo de prueba, el cliente quedó convencido del rendimiento de nuestra solución de limpieza in situ propuesta. El proceso de limpieza de los filtros ya no requiere la ayuda de dos empleados para limpiar manualmente cada unidad de filtrado. Ahora las unidades se trasladan a una zona de lavado y se conectan a un patín de bombeo para su limpieza.
Este nuevo proceso también permite limpiar varios filtros al mismo tiempo, lo que supone otro importante ahorro de tiempo.
Además de liberar costes de mano de obra, el sistema de limpieza in situ también tiene un gran impacto en temas importantes de sostenibilidad. La nueva solución utiliza menos agua, menos productos químicos y es mucho más segura. Además, ya no se utilizan paños ni otros consumibles en el proceso de limpieza.
En conjunto, el nuevo sistema ha tenido un profundo efecto en el proceso de limpieza de filtros de los clientes finales y en su huella medioambiental.