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Estudio de caso

Un nuevo sistema de lubricación automatizado ayuda a reducir el consumo de aceite en el proceso de fabricación de metales en un 50%


Sistema de lubricación automatizado para la fabricación de metales

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Jul 19



Una empresa multinacional de soluciones de almacenamiento produce sistemas de estanterías metálicas para una gran variedad de industrias. La producción de estanterías de alta calidad es una prioridad absoluta, por lo que el acero se estampa en la empresa de acuerdo con requisitos muy específicos. Para lubricar la chapa antes de estamparla se utilizaba una boquilla de pulverización de aire. Esto provocaba un desperdicio de aceite, un entorno sucio, una mala distribución general y, por tanto, problemas de calidad. Estaba claro que necesitaban un sistema de lubricación automatizado.

El objetivo de la empresa era actualizar su solución de lubricación a un sistema automatizado que pudiera aplicar una fina capa de lubricante consistente y uniformemente distribuida sobre el acero a medida que éste pasara por las diferentes etapas de conformación. El sistema también tenía que ser capaz de adaptar la tasa de aplicación a la velocidad de la línea para evitar el desperdicio.

El sistema de lubricación automática AutoJet L210

Nuestro experto en pulverización se dio cuenta de que el sistema de lubricación automatizada AutoJet® L210 resolvería los problemas de lubricación y desperdicio del cliente. Este sistema proporciona un método automatizado muy eficaz para aplicar los lubricantes de forma uniforme y completa, todo ello en función de la velocidad de la línea.

Tras realizar las pruebas y comprobar la calidad final, el cliente reconoció el potencial y decidió encargar 3 sistemas de lubricación AutoJet® L210.

Resultado

El cliente quedó satisfecho con el resultado final. El nuevo sistema aplica automáticamente y con precisión el lubricante en función de la velocidad de la línea. Esto ha supuesto un aumento del 10% de la velocidad y, por tanto, un 10% más de productividad. Pero lo más importante es que, al no haber más residuos, el consumo de aceite se ha reducido en un 50%. Esto ahorra el equivalente a 80 horas de trabajo a la semana y también tiene un gran impacto en los objetivos de sostenibilidad de la empresa.